Ford Almussafes empieza a fabricar el Mondeo y crea 650 empleos

Este progreso tecnológico ha sido posible por la implantación del ‘lean manufacturing’.

La factoría valenciana inicia la producción del icono de la planta de Genk, el vehículo más grande montado en la Comunitat

Valencia. Ford escribió ayer en Almussafes una nueva página en su historia con la entrada en la cadena de producción del Mondeo, una berlina grande que supone un cambio radical en la tipología de producto que se monta en la Comunitat Valenciana. Atrás queda la situación precrisis cuando por los rieles de la factoría circulaba el Mazda2, el Ka, el Fiesta y el Focus. Los dos últimos fueron los iconos de Almussafes durante el principio de siglo mientras los coches más grandes, como el Mondeo, quedaban reservados para las fábricas centroeuropeas consideradas como las productivas.

El cierre de la factoría de Genk (Bélgica) y el traslado de toda su producción a Almussafes supone la confirmación de un cambio de modelo en la factoría que ha pasado de ser la planta comodín que montaba los vehículos pequeños a convertirse en el referente de Ford en Europa con los encargos más tecnológicos y complejos. El Mondeo es el coche de gama más alta que se ha producido en Almussafes.

El paso dado ayer supone el inicio de la producción en cadena de la berlina aunque el volumen de ayer y de los próximos días será realmente bajo. El objetivo es que en a final de año se alcancen los 450 Mondeo al día, por lo que en 2015 se espera superar las 100.000 unidades/año.

La llegada de este nuevo modelo ha supuesto la contratación de 200 personas en la factoría de manera que, según explica Carlos Faubel, secretario general de UGT-Ford, la factoría ha alcanzado las 2.000 nuevas incorporaciones desde mayo de 2013. Estos nuevos contratos se producen pese a que este verano se ha despedido de Almussafes el monovolumen C-Max, un vehículo que utiliza la plataforma C (la tercera por tamaño en las factorías de Ford) y que supuso en su momento el principio del cambio de la planta valenciana hacia vehículos más grandes y de mayor valor añadido.

Según explica Emilio Orta, presidente de AVIA (asociación que reúne a los principales proveedores de la automoción en la Comunitat), este progreso tecnológico ha sido posible por la implantación del ‘lean manufacturing’ que, en esencia, consiste en un sistema de fabricación que logra la perfección en los productos realizados con los mínimos recursos utilizados. «El ‘lean manufacturing es ya una realidad en los proveedores de la Comunitat Valenciana. Somos más productivos que los franceses y, desde luego, que los italianos», asevera Emilio Orta.

Este aumento de la productividad ha llevado a que el número de operarios que necesita el parque de proveedores de Ford sea menor que los que habitualmente requería el sector. La regla habitual era que por cada nuevo trabajador en una factoría, en el parque se creaban tres puestos de empleo. «El efecto del Mondeo en el parque ha sido de unas 450 nuevas contrataciones», explica el presidente de AVIA.

De este modo, el berlina ha supuesto la contratación de 650 trabajadores en la Comunitat Valenciana entre la factoría y sus proveedores. Este balance se produce pese a la pérdida del C-Max, que ha penalizado a los proveedores que tenían una gran cantidad de piezas de este modelo y que no lo han podido compensar con la llegada del Mondeo.

El final de la transformación de la planta se producirá el año que viene con la llegada de los modelos Galaxy y S-Max que, junto al Mondeo, el Kuga y la Transit Connect, formarán el portfolio de Almussafes.

Fuente: lasprovincias.es