“La vida no es estar detrás de un iPhone”, afirma directora de Logística de Toyota en Europa
Lucía García Linares, directora de Logística de Toyota en Europa, sostiene que “nada es imposible” y recomienda a los jóvenes asturianos “pasión, perseverancia, liderazgo” y, sobre todo, “que se impliquen”, porque “son ellos quienes tienen que resolver los problemas de Asturias”. Predicando con el ejemplo, interrumpió ayer su actividad laboral en Bruselas para asistir a un evento organizado por Gijón Impulsa y Compromiso Asturias XXI. En octubre volverá de nuevo a Asturias para participar en el I Congreso de Innovación Lean que organiza Innovasturias.
Esta fue una entrevista que se le realizó en el marco de este evento.
¿Cuáles son las reglas de oro del método Lean?
Se fundamenta en dos pilares: el Just in Time (justo a tiempo), que consiste en producir solo lo que necesita el cliente en el momento en que lo necesita, se trata de eliminar cualquier desperdicio o los stocks, produciendo sobre los pedidos reales; y el Jidoka, que significa calidad integral, el objetivo es producir sin defectos de calidad, con lo que el operario debe parar la cadena de producción al detectar el mínimo error. Para que todo esto funcione hace falta un sistema de mejora continua, un trabajo diario en equipo donde se analizan los problemas y a eso se le llama Gemba, el lugar donde las cosas suceden. Quiere decir que no se pueden resolver los problemas desde el despacho, sino que hay que estar a pie de fábrica para a ayudar a los operarios inmediatamente.
El padre del Lean Manufacturing, Taiichi Ohno, creó el sistema de producción de Toyota hace 50 años. ¿Ha evolucionado desde entonces?
Ha ido evolucionando y seguirá haciéndolo. Aunque el método lo creo Ohno en Toyota, el término Lean se adoptó tras realizar el MIT (Massachusetts Institute of Technology) un proyecto de investigación que estudió el caso. A partir de allí popularizó esta estrategia que luego sería recogida en el libro Lean Thinking, escrito por Womack. No es un sistema estático, sino que habla de la mejora continua; hay que adaptarse a los tiempos, a las nuevas tecnologías, a las demandas, etcétera.
¿A qué sectores recomendaría su aplicación?
A cualquier sector, porque al final se trata de que no haya tiempos muertos por ninguna parte, hasta en casa. Una de las fases del método es ordenar, y eso se aplica al día a día. Es una filosofía de mejora continua, de resolver los problemas de una forma detallada.
Toyota acaba de hacer públicos sus resultados del primer trimestre del año fiscal nipón y ha ganado un 7,2% más. Sus cifras avalan el método Lean, ¿no es así?
Claro, porque la filosofía de Toyota es aprender de los errores y ser mejores. En 1973, fue el único proceso de producción que salió de la crisis y Japón preguntó a la empresa cómo aplicar su sistema a otros sectores.
El diésel tiene los días contados. Lo ha dicho la ministra. ¿Lo comparte?
No quisiera entrar en este tema porque lo desconozco. Me dedico a la logística y no voy a hablar de estrategia.
Pero Toyota ya ha anunciado que dejará de vender turismos diésel en Europa este año.
Lo único que hago es transportar lo que me mandan.
¿Cómo se ve Asturias desde el exterior?
La veo mejor, aunque me baso en la percepción de lo que sigo, no en ningún indicador. Hay muchas asociaciones e instituciones, como Innovastur, Compromiso XXI, Impulsa o el Idepa. Me parece que hay más dinamismo para hacer que la industria vaya hacia arriba. Antes era todo más de subsidios; ahora hay un cambio de mentalidad y voluntad para que las cosas evolucionen.
Usted es una directiva de éxito. ¿Qué recomendaría a los jóvenes asturianos?
Que se impliquen, que trabajen, que nada es imposible con pasión, perseverancia, liderazgo y espíritu de entrega. Los problemas que tiene Asturias los tienen que resolver ellos, no sus padres ni el Gobierno. Hoy tienen más posibilidades de las que había antes. Les diría que salgan y aprendan. Lo tienen más fácil, pero deben implicarse. La vida no es estar detrás de un iPhone, es implicación.
Fuente: El Comercio.